domingo, 29 de marzo de 2015

El suicidio endosado

El suicidio está definido como toda muerte que resulta, mediata o inmediatamente, de un acto, positivo o negativo, realizado por la víctima misma.Es necesario matizar esta afirmación especificando que existe suicidio cuando la víctima, en el momento en el que realiza el acto que debe poner fin a su vida, sabe con toda certeza lo que tiene que resultar de él, siendo esta certeza mas o menos firme.(Durkheim, 1982)
En los casos de suicidio, la policía ha de tratar el caso de igual forma que un crimen. Es muy importante que el médico forense examine el cuerpo y el lugar de la muerte, antes del levantamiento del cadáver, ya que a veces puede confundirse un homicidio, un suicidio o una muerte accidental.
Hay también ocasiones en las que los suicidas se ayudan de otras personas para realizar el acto. Esto ha de ser estudiado hasta poder demostrar que esas personas no son homicidas. El siguiente artículo trata los distintos tipos de suicidio en los que están implicados, de forma voluntaria o no, otras personas.

INTRODUCCIÓN 

Pocos actos deberían tener un matiz más personal que el suicidio ya que, como indica el origen del término, se trata de tomar la decisión de acabar con la propia vida. Cierto es que la conducta puede estar condicionada por una constelación de circunstancias que, en mayor o menor medida, dirigen la voluntad hacia el punto sin retorno de la muerte.
(...)
El objetivo es diferenciar dos tipos de suicidio, atendiendo a quién va a ser el brazo ejecutor de la muerte provocada. Evidentemente no es una cuestión baladí, puesto que tras el fallecimiento, el muerto va al hoyo, pero el vivo queda en un bollo que puede resultar ciertamente complicado. Atendiendo a lo planteado en el párrafo anterior, se pueden diferenciar dos tipos de suicidio: el suicidio responsable y el suicidio endosado. Véanse a continuación sucintamente sus características.

SUICIDIO RESPONSABLE

En este tipo de actos, desde la concepción de la idea hasta su puesta en acción, depende en exclusiva de quien pasa a la otra vida.(...)
Este tipo de actos responsables constituyen la gran mayoría de los casos de suicidio y tentativas suicidas y fuera de atribuciones de culpas por parte del entorno más cercano, no cabe buscar responsabilidades ajenas al actor, salvo aquellos casos en los que la conducta letal se haya dado en el marco de una prestación de servicios sanitarios, en cuyo caso se abre un enorme abanico de posibilidades.
(...)

SUICIDIO ENDOSADO 

Endosar: Trasladar a alguien una carga, trabajo o cosa no apetecible. Es la segunda acepción del término que puede encontrarse en el Diccionario de la Real Academia Española (DRAE, en los sucesivo). En el caso del suicidio endosado (SE, en lo sucesivo), a diferencia del suicidio responsable, otro u otros van a verse involucrados en la muerte o su tentativa. Aquí es donde el bollo al que se hacía referencia más atrás, puede presentarse con un relleno que quizás perturbe la vida de quien –en esencianada tiene que ver con los fines buscados por la víctima.
1.- Eutanasia.
No va a ser objeto de estudio en este trabajo. Únicamente se ha de señalar que diferentes trabajos, califican este tipo de muerte como un suicidio encargado a otros. Evidentemente este concepto sería aplicable a aquellos casos en los que, la persona que solicita la aplicación del procedimiento, está capacitada para llevar a cabo un acto tendente a acabar con su propia vida.
 2.- Suicidio asistido voluntario.
Tampoco es intención de los autores profundizar en esta variedad; generalmente se trata de actos premeditados y bien documentados, que no van a significar problemas para los ejecutantes, siempre que actúen dentro de la legalidad en cada territorio. No obstante, se harán algunos comentarios. La calificación de voluntario, hace referencia a la conciencia de participación de quien pone en marcha los actos necesarios para terminar con la vida de la persona que solicita la asistencia. Desde este punto de vista, se pueden distinguir dos modalidades: el suicidio asistido por un médico y el asistido por un lego en medicina.
(...)
3. Suicidio asistido involuntario. 
Atendiendo a su frecuencia, esta modalidad supone la mayor del total de los suicidios endosados. Tiene lugar cuando el suicida ya ha tomado la decisión de acabar con su vida, pero no encuentra fuerza u ocasión para llevar a cabo su intención deletérea y ha de contar con la involuntaria participación de otro u otros. El ejemplo por excelencia de esta variedad es el atropello, sea por vehículos a motor de trayecto obligado o por el resto de medios terrestres de transporte. El uso de un tren en cualquiera de su variedades elementales –interurbano, suburbano o tranvíasigue estando entre las preferencias de quienes quieren endosar su muerte a otros, sin pensar en las consecuencias de todo tipo que les puedan ocasionar. Un estudio realizado en Portugal, pone de manifiesto que la mayor parte de los casos de atropellos producidos por este mecanismo son suicidios. También se hace referencia a los costes económicos y psicológicos de este tipo de incidentes, que en ningún momento han sido previstos por el suicida.
(...)
De la otra modalidad de atropello provocado por el suicida, el que involucra a otros medios de transporte como turismos, furgonetas o camiones, pueden hacerse similares afirmaciones. Una diferencia sustancial es que, generalmente, el número de afectados por el incidente suele ser menor. Sin embargo, la investigación del origen del atropello, sí puede resultar mucho más compleja, especialmente cuando el hecho no sucede delante de testigos que puedan colaborar. Otra posibilidad de aclarar los hechos surge cuando el momento del impacto entre el vehículo y el peatón, es grabado por una de las cada vez más frecuentes cámaras de vigilancia.
4. Suicidio provocado. 
En esta variedad de suicidio endosado, el brazo ejecutor de la muerte va a desarrollar conductas voluntarias dirigidas contra el suicida, con la intención de neutralizar una acción agresiva. El prototipo de este tipo violencias es lo que los anglosajones denominan suicide by cop o suicidio a manos de la policía. En 1959 Marvin Wolfgang aportó a la criminología un concepto fundamental para entender el fenómeno que se va a exponer: homicidio precipitado por la víctima.
(...)
Para tratar de llegar a la verdad en este tipo de incidentes, se han propuesto unos criterios que deben darse en la víctima. Algunos de ellos son:
• presencia de una enfermedad mental o somática crónica
• abuso de alcohol y otras drogas
• incidente iniciado por el sujeto
• asegura la presencia de la policía
• la víctima fuerza la confrontación
• amenaza a ciudadanos
• inicia acciones agresivas
• no depone el arma con la que amenaza
Desde el punto de vista de la Clasificación Internacional de Enfermedades, se trataría de una variedad de muerte por intervención legal.
5. Suicidio maquinado.
El DRAE dice en la entrada maquinar: Urdir, tramar algo oculta y artificiosamente. Así, la persona que decide poner fin a su vida por este medio, ha de elaborar todo un complejo escenario para tratar de inculpar a otro de su muerte; en Román paladino: transformar un suicidio en aparente homicidio. Ha de advertirse que, en adelante, la prueba pericial no va a tener demasiada participación y la realidad de los hechos, viene a confundirse con la ficción o la imaginación. Sin embargo hay casos bien estudiados y aclarados.
(...)

Aviso: este artículo no está al completo en la entrada. Para acceder a el te dejo el link, donde también podrás encontrar la bibliografía del texto original:
http://www.uv.es/gicf/4A1_Verdu_GICF_14.pdf

FUENTE:
Verdú F.
Adam A.
Francès F.
Departamento de Medicina Legal y Forense.
Universitat de València. España.

4 comentarios:

  1. Buenos días Lucía,
    No comentaré la entrada completa, sino algunos aspectos que más me han llamado la atención.

    Una de las cosas que parece obvia pero que en ocasiones de tensión o presión puede no cumplirse, es la de mantener al cuero en el lugar del supuesto suicidio. A veces parece que el contexto y cada pequeño detalle carece de importancia, pero cualquier pista por mínima que sea, es bastante valiosa.
    Por ejemplo el lugar estrictamente exacto de la muerte (para comprobar si realmente hay posibilidad de que la muerte haya sido allí).

    Otra de las cosas a comentar es el tema de lo complicado que es en algunas ocasiones comprobar que realmente ha sido un suicidio y no un homicidio. Aquí es cuando vuelvo a remarcar la importancia de los pequeños detalles. Es muy difícil identificar si el "suicida" tenía intención de morir, si ha sido un accidente, o si la muerte ha sido causada por otra persona.

    Muchas gracias por la entrada, no había leído nada acerca de los tipos de suicidio que existen. Creo que ha sido de gran utilidad para ampliar conocimientos en el campo de la criminología.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Marta.
      A mi también me resulto muy curioso encontrar este estudio tan detallado del suicidio, pero me resultó más curioso que también hablase de los suicidios que en realidad son homicidios. Es por eso que decidí incluirlo en este blog.
      Como tu dices es muy importante estudiar cada detalle y no dar nada por sentado. Lo más importante de toda investigación es conocer la causa que ha llevado a una persona a suicidarse o a matar. Y para ello se ha de conocer muy bien la situación de cada persona en el momento de su muerte.

      Eliminar
  2. Hola Lucía,
    Una de las cosas que me ha llamado la atención de tu entrada es la variedad de suicidios existentes, la verdad es que no pensaba que hubiese tantos.
    Como mi compañera Marta ha dicho en su comentario, es de vital importancia no tocar absolutamente nada de la escena del crimen, ya que los detalles pueden servir para exculpar a un inocente o atrapar a un asesino. Pero en el momento de ver un cuerpo muerto no creo que se piense "cuidado, no tengo que toca ni un pelo".

    En fin gracias por subir esta entrada, ahora tenemos un poco mas de conocimiento criminalístico en nuestra mentes gracias a ti.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Silvia.
      He de decir que te doy la razón. La verdad es que si alguien no entrenado y preparado (policías, criminólogos, abogados, etc) encontrase un cuerpo sin vida tendido en el suelo, no pensaría en la investigación que se llevará a cabo más adelante. No sé ni que se podría pensar en ese momento. Pero por ello, también se interroga y se tiene en cuenta a las personas que encuentra el cadáver.

      Eliminar